Trabajar en la oficina es una tortura para muchas personas, pero la mejor opción laboral para la mayoría. En cualquier caso, no todo el mundo está realmente preparado para sentarse delante de un ordenador durante muchas horas seguidas. Estas son algunas de las habilidades para trabajar en oficina:

1)  Tener conocimientos de mecanografía: para trabajar rápido en una oficina, hay que ser desenvuelto con el teclado. Si bien no es indispensable tener un título al respecto, sí es bueno saber defenderse. Si solo usas tus dedos índices para teclear, tu sitio no es la oficina.

2)  Tener una buena vista: es una de las habilidades para trabajar en oficina más importante, hay que tener en cuenta que los los ojos son los que más sufren el estar expuestos tantas horas a la luminiscencia de la pantalla de un ordenador. Cuídalos y utiliza unas gafas adecuadas para no dañarlos.

3)  Adoptar una postura correcta en tu silla de oficina. A grandes rasgos, la postura ideal es:

a) Espalda erguida y alineada.

b) Silueta con tres ángulos rectos: brazo-antebrazo, espalda-muslo y tibia-muslo.

c) Cuello recto, hombros relajados.

d) Monitor alineado a la altura de los ojos o un poco por debajo.

e) Cuerpo no demasiado retirado de la mesa de ordenador y del teclado, para evitar inclinarse hacia adelante.

4)  Estar familiarizado con Internet: sea cual sea el puesto de oficina, la carga de trabajo en la Red es ya muy elevada.

5)  Ser ordenado: trabajar en un escritorio limpio y despejado es más práctico y psicológicamente más favorable.

6)  Ser organizado, que no es lo mismo que ser ordenado: utilizar agendas, calendarios, planificaciones…

7)  Estar concentrado: otra de las habilidades para trabajar en oficina es no distraerse fácilmente. Adiós al WhatsApp, a las redes sociales, a la pausa del cigarro y a otras muchas pérdidas de tiempo.